Las reglas de oro para un sueño seguro

Regla n°1: El bebé no debe quedar de lado o boca abajo porque esta posición es peligrosa. Debe dormir acostado boca arriba.

Regla n°2: No lo cubra demasiado al acostarse para que pueda respirar.

Regla n°3: Respeta tu patrón de sueño. Si se despierta por la noche, crea un ambiente tranquilo, sin ruidos ni luces. No sirve imponer horarios desde los primeros meses. Cuando aparecen los primeros signos de cansancio, como bostezos, frotarse los ojos, hay que acostarlo.

Regla n°4: Una cama ideal. La cama ideal es una cama con barrotes, con un colchón firme sin protector.

Regla n°5: Una cama ordenada. Evita los cojines, las cuñas para bebés y los peluches grandes que pueden ocupar mucho espacio en la cama.

Regla n°6: Los pediatras recomiendan una temperatura de 18°C ​​y 20°C en su habitación, verano e invierno.

Regla n°7: La cama con sombrilla sin añadir colchón porque su hijo corre el riesgo de quedar atrapado entre el colchón y la pared de la cama con sombrilla.

Regla n°8: En presencia de su bebé, por supuesto, no fume ni en casa ni en el coche.

Regla n°9: Evite poner a su bebé en su cama, porque existe el riesgo de asfixia en la almohada y enrollarse en el edredón.

Regla n°10: Si observa un cambio en el comportamiento de su hijo; llanto repetido, pérdida de apetito o inquietud constante. Llévalo al médico.

Fin

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